El Capitán Trueno, la mili más larga

El mítico capitán Trueno cumple 50 años en un 2006 repleto de libros y homenajes. Apto para nostálgicos.

Cincuenta ya. Dicen quienes han estado allí que empieza entonces una especie de cuesta abajo. Y el caso es que el capi cumple su primer medio siglo hecho el mismo chaval que cuando empezaba en esto. Ventajas de ser superhéroe de tebeo. Ni calvicie incipiente ni barriguita cervecera ni gafas para ver de cerca. Nada. El mismo que cuando empezó. Genio, figura y más valor añadido que un paquete de Ducados rubio.
El capitán Trueno ha resultado ser, además de martillo de herejes, caballero andante y azote de tiranos, todo un ejemplo de heterosexual, vigoréxico, armado, peligroso y tan patriota que, al grito de «¡Santiago y cierra España!», a buen seguro que pululaba por las pesadillas más tenebrosas de Carod-Rovira cuando sólo era un chiquillo de pantalón corto.
«¡Recáspita!», «¡Albricias!», «¡Rayos y centellas!», también es verdad que, tras 50 años al pie del cañón, al famoso paladín de la justicia, defensor de los débiles contra opresores y tiranos, ya lo podían haber ascendido a general.
Será por ardor guerrero (si la suya, sumada a la de sus dos compañeros de peripecias, Goliath y Crispín, fue la mili más larga de la que se tiene constancia en este país llamado España): en junio de 1956, con guión de Víctor Mora (su creador) y dibujos de Ambrós (nombre artístico de Miguel Ambrosio Zaragoza, fallecido en 1993), llegaba a los quioscos de posguerra el primer ejemplar de la serie Capitán Trueno, publicada en el cuaderno Colección Dan, de Bruguera.
El musculoso héroe de las mallas ajustadas y la melenita al viento empezaba a galopar con un éxito casi instantánteo, aunque alcanzó su máxima popularidad a mediados de la década de los 60, cuando su tebeo llegaba a vender casi 400.000 ejemplares en cada entrega semanal. Lo que propició que, al ver que la cosa iba tan bien, Víctor Mora crease con el mismo patrón al Jabato y al corsario de Hierro, otros dos superhéroes cañís.
Al ilustrísimo señor Trueno, militar de profesión que siempre luchó contra el sectarismo, la falta de razón, la ambición desmedida, la tiranía, la venganza, la injusticia, el capricho, la muerte y la lujuria, acompañado de su eterna novia, Sigrid, deseada por todos los malvados, raptada una y mil veces para ser rescatada, no le faltarán reediciones, libros y exposiciones (ver dos de los más importantes en el destacado). ¿Porque quién decía que después de lo de El Quijote no íbamos a tener a quien homenajear en 2006?

Fuente:abc.es
Autor: Ada del Barrio