El Hibisco
Flor de hibisco
Existen por lo menos, 300 formas diferentes de hibiscos. Dentro del género Hibiscus fundamentalmente hay dos: Hibiscus Rosa-Sinensis, también llamada Rosa de China y el Hibiscus Syriacus o Rosa de Siria.
El hibiscus syriacus, es una planta que se adapta perfectamente a los medios abiertos. Requiere exposición a pleno sol y suelos bien drenados y ricos en humus. Resistente a las heladas y muy adecuada para los jardines. También se desarrolla en lugares protegidos por un muro,...
La época de floración es de finales de verano a mediados de otoño. Comienza a crecer tan tarde en primavera que muchas veces parece como si se hubieran muerto.
Mediante la poda es posible conseguir flores extra largas, ya que éstas aparecen sobre los tallos del último año. Durante la primavera corte bastante los tallos viejos.
Para la propagación de esta planta coja esquejes de unos 10 cm de largo en primavera y verano. Para hacerlo, corte un trozo de tallo viejo que tenga un brote. Inserte los puntas del esqueje en hormonas de enraizamiento y plántelo en compost, mezclado con arena gruesa. Procure mantenerlos húmedos y a 21ºC de temperatura. Cúbralos con protección y situelos en lugar iluminado. Para los hibiscos anuales, siembre las semillas en primavera y cuando las plántulas tengan 7-10 cm. de altura, plántelas una a una en macetas.
El hibiscus rosa-sinensis, es especie de litoral que se comporta como planta de interior en zonas frías y que debe contar con mucha iluminación y gran humedad, sobre todo en su parte aérea.
En verano sitúela al exterior-sombra. En invierno necesita estar en interior fresco, sin calefación y con riego excaso. Cuando vuelva a brotar, efectúe una generosa poda tras lo cual podrá llevarla a la terraza.
El hibisco, una planta libre de sustancias estimulantes